Periodistas de Inforía especializados en la relación de pareja, realizaron un estudio científico, que nos revela algunas de las diferencias de nuestras vacaciones en pareja, a medida que pasa el tiempo.
Flamante pareja: El destino no es lo más importante, solo el hotel, en realidad, solo la habitación, ya que es el lugar donde más desarrollaran sus actividades, no importa si hay aire, ventilador, o ventana con vista al mar, lo mas importante es que exista un lecho de amor, de media o una plaza, ya es suficiente. Generalmente vuelven blancos, y no precisamente, porque les haya tocado días de lluvia
Dos años de casados: Ya nos ponemos un poco más exigentes, nuestra idea es descansar y el departamento o casa debe reunir las comodidades básicas y elementales, ejemplo: televisor (para ver el torneo de verano).
Cinco años de casados: La playa sigue siendo el destino mas elegido, una tarde en la misma incluye indefectiblemente lentes de sol, para poder apreciar el “bello paisaje” sin ser descubiertos. También suelen surgir caminatas solitarias con la excusa de “dar una vuelta”, eso si, ya debemos contener la respiración para esconder nuestra panza de cinco años de casados.
Ocho años de casados:ya tenemos uno, dos, o tres niños. Drástico cambio para la vida en vacaciones, aquí estas ya no son para descansar, si no para trabajar más. Nos convertimos en bañeros, amos de casa, niñeros, economistas, y hasta en animadores infantiles.
Quince años de casados: Aquí lo más importante, es nuestra revista de crucigramas, ya que el dialogo pasó a un plano menos importante. Ya se suelen emitir frases como: “que bárbaro, porque no van a jorobar con la pelota a otro lado” y “no puede ser como van estar con esa música tan alta”.
Para la mujer lo mas trascendental es el bronceador, el protector, crema antiarrugas, crema de limpieza, crema nutritiva, reafirmante, etc, ect.
Continuará…
