18 enero 2012

Ya al año de edad, los bebés detectan a los mentirosos y no confían en ellos

Aunque muchos piensan que los chicos más pequeños son fáciles de engañar, en realidad ellos son capaces de identificar la mentira y elijen no seguirla. De hecho, los bebés no imitan a los adultos que ya anteriormente demostraron ser poco confiables.

La psicóloga Ivy Brooker de la Universidad de Concordia (Canadá) llegó a dichas conclusiones luego de realizar un estudio que acaba de ser publicado en la revista Infant Behavior and Development. De acuerdo con la experta, los chicos pueden identificar a los adultos confiables y a los no confiables y solo siguen a los primeros.

"Los niños imitan el comportamiento de los adultos creíbles. En contraste, la misma conducta realizada por una persona no creíble es interpretada como irracional o ineficiente, y por lo tanto no vale la pena imitarla", asegura Brooker.

Para llegar a estas conclusiones, los especialistas hicieron el estudio con chicos de 13 a 16 meses de edad que fueron divididos en dos grupos. Un conjunto trabajó con investigadores confiables mientras que a otros les tocaron investigadores no confiables, es decir, que ya habían mentido alguna vez.

Para comenzar, los expertos miraron el interior de una caja y expresaron una fuerte emoción. Invitaron a los chicos a ver el contenido y allí había un juguete o nada. Gracias a esta experiencia los jóvenes voluntarios aprendieron qué adultos eran dignos de su confianza.

A continuación, el mismo experto usó la frente en vez de las manos para apretar un botón y luego observaron si los chicos lo imitaban o no. Y resultó que el 34% de los chicos siguió a los investigadores no confiables mientras que el 61% de ellos imitó a los creíbles.

"Al igual que los chicos más grandes, los bebés recuerdan si un adulto fue exacto o no -asegura la psicóloga Diane Poulin-Dubois-. Los chicos eligen no aprender de una persona que creen que no es confiable".

No hay comentarios.: